APRENDE A DESCUBRIR EL ESCORPIÓN QUE SE ASOMA SOBRE LA CORDILLERA EN LAS NOCHES DE INVIERNO

Utilizando el interferómetro del VLT (VLTI, Very Large Telescope Interferometer) de ESO, un equipo de astrónomos ha construido esta impresionante imagen de la estrella supergigante roja Antares. Sin contar al Sol, se trata de la imagen más detallada de este objeto, o de cualquier estrella, jamás obtenida. Crédito: ESO/K. Ohnaka

Quizás te ha pasado, que al querer observar una constelación te ha sido imposible de encontrarla o, si la ubicaste, no has podido reconocer su forma, ya que no se parece en nada al nombre u objeto que personifica. Eso no te sucederá con la constelación del Escorpión, ya que es una de las pocas que representa fielmente el artrópodo que personifica.

En estas noches de mayo, podrás ver como aparece al llegar la noche, sobre el horizonte Este (la Cordillera de Los Andes en Chile), un perfecto Escorpión. Los griegos fueron los primeros en ver en este conjunto de estrellas a un escorpión, aunque también los mayas y los aztecas denominaban a esta región del cielo como “Zinaan ek”, es decir, “las estrellas del escorpión”.

El corazón, del singular insecto instalado en los cielos, es Antares. Una estrella supergigante roja tan grande que, si estuviera en el lugar de nuestro Sol, llegaría hasta el cinturón de asteroides, ubicado entre Marte y Júpiter.

Este mapa muestra la posición del cúmulo globular de estrellas Messier 4 en la constelación de Scorpius (El Escorpión) cerca de la brillante estrella Antares. Crédito: ESO, IAU and Sky & Telescope

Aprovecha de tomar tus binoculares o telescopio y disfruta de esta hermosura mientras aún sigue con vida, ya que su rojizo característico delata que está a punto de morir (mañana o dentro del próximo millón de años) como supernova, que es la explosiva muerte de este tipo de estrellas.

Y a ello agreguemos el siguiente dato singular: “Matusalén”, el planeta extrasolar más antiguo descubierto hasta la fecha, está ubicado en la constelación del Escorpión. PSR B1620-26 b es el nombre técnico de este longevo cuerpo celeste. Cálculos arrojan que se formó hace 12.425 millones de años. Los exoplanetas orbitan estrellas que viven más allá de nuestro sistemas solar. El primero de ellos fue descubierto el año 1995 y, hasta la fecha, superan los cuatro mil.

El Escorpión aparece en las noches de mayo, pero nos acompañará todo el invierno, mostrándose cada vez más arriba del horizonte, a medida que avanza la fría temporada invernal y hasta la llegada de la primavera.

Así que atento a Escorpión y, especialmente a Antares, pues podrías ser el primer humano en ver la explosión de una estrella a simple vista durante el siglo XXI.

Y pasar a los anales de la historia.

Cielos abiertos,

Desde La Serena, Coquimbo, La Región Estrella,
Hernán Julio Illanes
Periodista Científico Especializado en Astronomía

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