Un equipo de astrónomos confirmó la existencia del exoplaneta Gaia-4b, uno de los planetas más masivos que se conoce orbitando una estrella de baja masa, en gran parte gracias al espectrógrafo NEID que se encuentra instalado en el Telescopio WIYN de 3,5 metros del Observatorio Nacional Kitt, un Programa de NOIRLab de la Fundación Nacional de Ciencias de Estados Unidos (NSF). Gaia-4b es también el primer exoplaneta detectado por la sonda espacial Gaia de la Agencia Espacial Europea, utilizando la técnica astrométrica.
